Isla Griegas: Rodas, Symi y Kos 14/10/2024 al 22/10/2024

Desayuno en hotel y visita a la ciudad medieval de Rodas.

La ciudad medieval posee un recinto amurallado magníficamente conservado. Fue construido por los Caballeros Hospitalarios de la Orden de San Juan durante los 212 años que allí estuvieron y delimita un recinto semicircular que rodea el antiguo puerto.

Las murallas, que tienen un espesor de 12m, están fortificadas con tres torres y tienen nueve puertas de acceso entre las que destaca por su majestuosidad la puerta de la Marina frente al puerto. Esta puerta está flanqueada por dos grandes torres defensivas decoradas con la flor de Lis sobre el escudo de la orden.

El recinto amurallado se haya a su vez dividido por otra muralla interna que delimita una pequeña zona que actuaba como ciudadela en la que se concentraban los principales edificios relativos a la Orden de San Juan.

En esta sección de la ciudad, llamada Kolakio, está la Calle de los Caballeros con los distintos albergues de las nacionalidades que componían la Orden. El edificio de la delegación española se llama “Castellania” y hoy en día alberga una biblioteca.

Al final de la calle, se encuentra el Palacio de los Grandes Maestres en cuyo interior se puede visitar una interesante colección de muebles de los siglos XVI y XVII e interesantes mosaicos romanos procedentes de la vecina isla de Kos.

Una escalera monumental conduce al piso de arriba desde el que se puede admirar una vista panorámica de la ciudad. Este palacio fue destruido por una explosión en 1856 y los italianos lo reconstruyeron en 1940 para que sirviera de residencia a su rey Victor Manuel II. También fue utilizado como residencia de verano por Mussolini.

Después se continuará la visita por otro importante edificio, el Hospital de los Caballeros, construido en el siglo XV para atender a los caballeros de la orden heridos o enfermos. Inició su construcción el Gran Maestre catalán Antonio Fluvián y hoy en día alberga el Museo Arqueológico.

Almuerzo en restaurante local.

Tras la comida, se continuará la visita realizando un paseo por el resto de la ciudad medieval o Burgo, situado al sur de Kolakio. Allí encontraremos los antiguos barrios residenciales, como el barrio judío con su sinagoga, el barrio turco con la mezquita de Solimán, y también diversas iglesias católicas y ortodoxas y edificios públicos.

Caminando por las calles empedradas encontraremos plazas que parecen de otro tiempo como la de Hipócrates con su fuente en estilo otomano o la Plaza de los Mártires, con una bonita fuente adornada por tres caballitos de mar en bronce. Encontraremos también mezquitas, edificios bizantinos y templos antiguos como el edificio del Mercado, el Palacio del arzobispo, la Iglesia de la Anunciación, el edificio de Correos o el Ayuntamiento.

Por último, se visitará Mandraki, el antiguo puerto de la ciudad de Rodas que hoy en día es el puerto deportivo para barcos y yates privados. Abundan los edificios que datan de la ocupación italiana, a la derecha se sitúa el muelle de San Nicolás con sus emblemáticos ciervos de bronce y la torre medieval.

Regreso al hotel, tiempo libre y cena libre.

DÍA 3 (16/10):  RODAS  (MONTE SMITH ) – TSAMBIKA – ARCHANGELOS – RODAS

Desayuno en hotel. Tras ello, se visitará la desconocida Acrópolis de Rodas, situada en el Monte Smith, también conocida como colina de Agios Stefanos o colina de San Esteban. La colina lleva el nombre de Sir Sydney Smith, un almirante inglés que estuvo destinado en la colina en 1802 durante la guerra con los turcos para vigilar los movimientos de la flota de Napoleón.

La acrópolis de la antigua ciudad de Rodas constituía un extenso enclave que albergaba diversos santuarios, edificaciones públicos, templos monumentales y áreas de culto subterráneas.

Estas estructuras remontan su origen a los siglos II y III a.C. y actualmente aún no se ha descubierto la totalidad de los restos entre los que destacan el Templo de Apolo Pítico, el Odeón o el Antiguo Estadio y gimnasio.

La imponente estructura del Templo de Apolo Pítico se erige en el lado occidental de la terraza, situándose en la porción meridional de la colina. Aunque de dimensiones más reducidas en comparación con los templos dedicados a Atenea y Zeus, ubicados en el extremo septentrional de la acrópolis, este templo ostentaba un diseño períptero en mármol poroso.

El Odeón, ubicado en la base del sitio del templo, era un teatro de dimensiones reducidas, con alrededor de 800 asientos. En la actualidad, apenas algunas butacas y la orquesta subsisten de la estructura original. Se especula que estas áreas desempeñaron roles vinculados a ceremonias de culto a Apolo y a las actividades de la Escuela de Retórica de Rodas. Existe la creencia de que otro teatro de considerable tamaño también ocupaba la misma área circundante a la colina. Según una inscripción descubierta en la región, se evidencia la existencia de una extensa biblioteca en las proximidades del Odeón y del gimnasio.

Situado en la porción sudeste de la colina, el antiguo estadio de Rodas exhibía una longitud de 210 metros. En este escenario, se llevaron a cabo destacadas competiciones deportivas como parte de los renombrados Juegos Heleion, eventos que constituían una significativa festividad en honor al dios solar, Helios. La excavación y restauración de este estadio fueron realizadas por expertos italianos, quienes preservaron el mecanismo histórico de arranque empleado por los atletas en la antigüedad, así como el esfendone y algunos de los asientos inferiores del auditorio.

Ubicado al este del estadio, el gimnasio, de proporciones colosales y conformado por una estructura cuadrada de aproximadamente 200 metros en cada lado, destacaba por albergar valiosas obras de arte. Hasta la fecha, únicamente se han desenterrado las esquinas del lado oeste y noreste de este magnífico edificio.

Tras la visita, salida hacia el encantador pueblo de Archangelos.

Almuerzo en restaurante local.

Por la tarde, visitaremos el Monasterio de Tsambika, emplazado en la cima de una colina que ofrece vistas panorámicas del Mar Egeo. El monasterio recibe su nombre de la colina, conocida como Tsambika, y destaca por su relevancia histórica y las leyendas asociadas a su origen.

De acuerdo con la tradición local, el monasterio está vinculado a una leyenda que relata cómo una mujer que enfrentaba dificultades para concebir visitó el lugar y, tras orar a la Virgen María, logró concebir. Este relato ha llevado a que mujeres con problemas de fertilidad acudan al monasterio en busca de bendiciones y asistencia divina.

Desde el punto de vista arquitectónico, el Monasterio de Tsambika exhibe un diseño tradicional, caracterizado por paredes blancas y detalles en azul, típicos de la arquitectura griega. El acceso a la cima se logra mediante una escalera de 300 peldaños o, alternativamente, a través de la carretera que conduce al punto culminante.

El interior del monasterio resguarda iconos religiosos y objetos de devoción, creando un ambiente de serenidad y espiritualidad. La vista panorámica desde la cima, que abarca el mar y la región circundante, proporciona una experiencia única y enriquecedora para los visitantes.

Más tarde daremos un paseo por el pintoresco pueblo de Archangelos, el cual se encuentra en la costa este de la isla. Este tradicional asentamiento griego se caracteriza por sus encantadoras calles empedradas, casas de estilo arquitectónico local y su ambiente auténtico.

Regreso a Rodas. Tiempo libre y cena libre.

DÍA 4 (17/10): RODAS – KAMIROS – IALYSSOS – RODAS

Desayuno en hotel y salida hacia Kamiros, una antigua ciudad que ha sido llamada la Pompeya de Grecia, debido a que también quedó enterrada por la tierra, aunque en este caso no tuvo la culpa un volcán, sino que la ciudad fue abandonada poco a poco hasta quedar desierta y olvidada bajo la tierra tras el paso de los siglos.

Kamiros fue fundada por los dorios, aunque fueron los aqueos en el siglo VI a.C. los que le dieron su mayor esplendor llegando incluso a acuñar su propia moneda. A diferencia de Lindos, que tenía una gran tradición naval, la principal actividad de la sociedad de Kamiros era la agricultura, produciendo gran cantidad de vino, higos y aceite. La necesidad de exportar estos productos fue el estímulo para la creación de una importante industria de la cerámica.

La ciudad alcanzó su mayor auge en el S. VI a.C. y entró en declive hasta desaparecer en el siglo II d.C. El sitio arqueológico ocupa varios niveles. En lo alto de la colina se situaba la acrópolis, dominando la ciudad, que ocupaba una zona intermedia en la que vivía la población y el nivel inferior lo ocupaban entre otros el mercado, una fuente dórica y el ágora.

Los principales restos de monumentos visibles en la zona, pertenecen a los periodos helenístico y romano. Tras el terremoto que hubo en 227-6 a.C., la ciudad se reconstruyó y quedó dividida en tres niveles.

El nivel más bajo era una especie de ágora sagrada con santuarios y templos, el intermedio estaba formado por casas privadas dispersas y el superior era la acrópolis.

Entre otros monumentos se hallan también se encuentra el templo dórico de Atenea Cámira, de época helenística que fue construido sobre las ruinas del templo arcaico del siglo VI a. C.; un depósito de agua y acueducto; una stoa helenística y un altar helenístico. Desafortunadamente, muchos de los objetos excavados en Kamiros hay que contemplarlos en el museo Británico y en el Louvre.

Tras la visita, se continuará hasta Ialyssos, en la parte norte de la isla, que fue habitado en la época prehistórica. Se han encontrado restos de un asentamiento minoico en Trianda y cementerios micénicos en las colinas circundantes de Makria Vounara y Moschou Vounara (1700-1400 a. C.). Esta ciudad se extendía alrededor de la colina de Philerimos, lugar donde se emplazaba la antigua acrópolis y donde hay restos de edificios de la época arcaica, bizantina y caballeresca.

Destaca el Templo de Atenea Polias, la casa-fuente dórica con dos túneles que llevaban agua desde lo alto del cerro hasta una cisterna excavada en la roca, la iglesia de la época de los Caballeros del S. XIV con cubierta abovedada y dos capillas hexagonales, así como el baptisterio de una basílica paleocristiana de tres naves, construida sobre las ruinas del templo de Atenea. Se encuentran también fortificaciones bizantinas y las ruinas del katholikon de un monasterio bizantino.

Almuerzo en restaurante local. Por la tarde, regreso a Rodas.

Tiempo libre y cena libre.

DÍA 5 (18/10): RODAS – LINDOS – MONASTERIO DE FILERIMOS – RODAS

Desayuno en hotel y salida hacia Lindos, situada en la costa oriental de Rodas, a 55 km al sur de la capital.

Es uno de los pueblos más bellos de Grecia y, a pesar de ser un lugar famoso que atrae numerosos visitantes a lo largo del año, ha sabido conservar su carácter de villa pesquera medieval. Construido en la ladera del monte Krana fue antiguamente la segunda ciudad de Rodas, después de la capital. Sus calles empedradas, las casas encaladas con techos de teja roja y su pequeño puerto llamado San Pablo, en recuerdo a la primera parada que allí hizo el apóstol en su viaje, se unen a un envidiable emplazamiento junto a una bonita playa.

Todo ello hace que Lindos sea un lugar único y especial. Sin ir más lejos, fue el escenario escogido para rodar la mundialmente famosa película protagonizada por Anthony Queen, “Zorba el griego”, que popularizo el tradicional baile del sirtaki.

Y dominándolo todo sobre un promontorio abrupto está la antigua acrópolis donde se conservan importantes restos arqueológicos entre los que destaca un templo consagrado a Atenea Lindia del siglo IV a.C. La Acrópolis vivió su mayor apogeo en los tiempos de uno de los grandes sabios de la antigüedad, el sabio Cleóboulos, que era uno de los más prósperos ciudadanos que financió las obras realizadas en la Acrópolis.

El templo de Atenea Lindia se levanta en el 100 a. C. y se convierte en un centro importante de culto a Atenea. Numerosas excavaciones en este lugar han sacado a la luz importantes objetos que podremos ver en el Museo Arqueológico de Rodas, en la ciudad medieval.

Además, distintos documentos y escritos históricos han situado aquí, en determinados momentos de la historia, a importantes personajes como Hércules, Alejandro Magno o Helena de Troya.

Almuerzo en restaurante local.

Después de comer, se visitará el monasterio medieval de Filérimos, cuya iglesia está construida sobre un antiguo templo dedicado a Atenea y sobre unas catacumbas de la época paleocristiana. Fue construido en el siglo XIV por los Caballeros de San Juan en piedra y en estilo gótico, ocupando lo que anteriormente era otro monasterio bizantino.

Durante la ocupación otomana fue utilizado como establo, por lo que se hizo necesaria una importante reconstrucción hace unos 70 años. Antes de dejar el monasterio se puede visitar la pequeña capilla subterránea de San Jorge. Saliendo del recinto y por un camino que asciende se llega a lo alto de la colina, en la que se construyó una enorme cruz que domina unas vistas espectaculares.

Regreso a Rodas. Tiempo libre y cena libre.

DÍA 6 (19/10): RODAS – SYMI

Check-out y salida hacia el puerto para tomar el ferry hacia Symi.

La pequeña isla de Symi pertenece al grupo de islas de Dodecaneso junto con Rodas, Karpathos y Kos, las tres más grandes, y las menores: Tilos, Nisiros, Kalimnos, Astypalea, Leros, Patmos, Kassos y Kastelorizo (que es la más alejada).

Su superficie de apenas 59 km2 es montañosa y está surcada por pequeños valles interiores y la leyenda la hace el lugar de nacimiento de las Tres Cariátides. Estas tres diosas tan femeninas eran hijas de Zeus y Eurínome, la oceánide hija de Océanos y Tetis. Encarnaban el encanto en todos los aspectos de la vida, como indica el significado de sus nombres, Aglaya la belleza, Eufrosine el júbilo y Talía las festividades. Bastante de este encanto ha quedado en la pequeña isla de Symi.

El nombre de la isla, Symi, por el que se la conoce en la actualidad, está empapado de mitología como no puede ser de otra manera. Symi era una ninfa que, tras unirse al dios del mar, Poseidón, tuvo un hijo llamado Cthonios, que fue el rey de los primeros pobladores de la isla y desde entonces tomó el nombre de su madre la ninfa. Otro de los míticos primeros pobladores de Symi fue Glayko, un marinero que enseño a los habitantes el arte de la pesca y la natación.

La capital Symi, está situada en la costa norte frente al islote de Nimos y está formada por dos núcleos urbanos. Abajo esta la zona del puerto al que se denomina Gialos o Epano Symi (la ciudad de abajo) y arriba se encuentra Chora o Ano Symi (la ciudad de arriba).

Al conjunto de la población se le ha concedido merecidamente el título de “Pueblo de Interés Nacional” ya que numerosas casas, edificios y mansiones son del siglo XIX, de estilo neoclásico. Esto le confiere una gran homogeneidad a este paisaje urbano que está protegido desde los años 70 y que refleja un pasado rico y aristocrático. Tanto las edificaciones del puerto como las de la zona alta trepan por la ladera de la montaña y para acceder de una a otra se utiliza una calle llamada Kali Strata, con 500 amplios escalones.

A ambos lados del camino quedan las casas neoclásicas de dos o tres pisos, con hermosos balcones y portones de madera, tras los cuales suele haber patios interiores adornados con flores. Las fachadas van del blanco al amarillo pastel dando una sensación de elegancia, brillantez y luminosidad que atrapa la vista.

En el interior de estas casas abundan los trabajos de madera tallada, una de las artesanías por las que Symi es conocida. A medida que ascendemos hacia Chora, la parte alta, las casas no son tan grandes y no hay tanto ambiente como en el puerto, donde se concentra la vida de la ciudad.

En el puerto, Gialos, se pueden visitar varios lugares de interés, como la llamada Torre del Reloj (una imponente edificación construida en el año 1890), el astillero, el Monumento al Soldado Desconocido y por supuesto callejear para disfrutar de la amplia oferta de tabernas, “cafeníos” (cafeterías tradicionales), tiendas y restaurantes que sin duda dejarán muy buen sabor de boca en el visitante.

Hasta Chora, la ciudad alta, merece la pena llegar, a pesar de lo empinado del camino, no solo por las estupendas vistas sobre el paisaje circundante sino por los interesantes sitios que se pueden visitar. Aquí está emplazado el Castillo de los Caballeros de la Orden de San Juan con su escudo en la entrada. Fue construido en el siglo XIV sobre un templo dedicado a Atenea Acra y parcialmente destruido por los bombardeos durante la Segunda Guerra Mundial.

Check-in y tiempo libre. Cena en restaurante local.

DÍA 7 (20/10): SYMI – KOS

Desayuno en hotel y check-out. Tras ello, traslado al puerto para tomar el ferry que nos lleva a la isla de Kos.

Llegada a Kos y check-in. Tras ello, daremos un pequeño paseo para ir conociendo la ciudad.

Cena en restaurante local y tiempo libre.

DÍA 8 (21/10): KOS

Desayuno en hotel. Tras ello se visitará el santuario de Asklepio (Asklepeion).

En la isla de Kos nació, en el año 460 a.C., el que está considerado como el padre de la medicina, Hipócrates, quien con esa gran capacidad de pragmatismo y raciocinio que tuvieron los grandes científicos, estadistas, artistas y filósofos del siglo de Pericles supo sentar las bases de la medicina moderna. Nacido en el seno de una familia acomodada, su padre y su abuelo ya practicaban las artes curativas. Hipócrates fundó una escuela que revoluciono la práctica de la medicina de su época, dándole entidad como profesión independiente de los otros campos con los que se confundía, religión y filosofía.

Sistematizó mucho de los conocimientos que ya se tenían, estableciendo prácticas médicas concretas e instaurando el compromiso llamado “juramento hipocrático”, que ha llegado hasta nosotros adaptado a nuestro tiempo.

Según la tradición, el “padre de la medicina moderna” impartía las clases a sus alumnos en la antigua ciudad de Kos, bajo la sombra de un gran árbol, un plátano. Hoy en día aún existe este árbol (no se puede precisar si es el original o algún vástago de aquél) al que se considera el árbol más longevo de Europa. La tradición también dice que el apóstol San Pablo en su viaje de evangelización predicó también bajo su sombra. Nunca un árbol tuvo tan insignes personajes bajo su copa.

Cuando Hipócrates murió en el año 357 a.C. ya había creado una corriente de médicos “modernos” que continuarían su obra. A las afueras de la ciudad y sobre una colina se construyó un templo dedicado a Asclepios, dios de la salud, y al propio Hipócrates, que incluía un centro de curación, termas y una escuela de medicina para formar futuros médicos. Allí se ponían en práctica sus enseñanzas en lo que en realidad se puede considerar el primer hospital de la historia, ya que recibía pacientes de todo el Mediterráneo. Se denominó Asklepión y hoy en día se pueden visitar sus ruinas.

Almuerzo libre.

Antes o después del almuerzo, se visitará también la Basílica Paleocristiana de Agios Stefanos. De todas las basílicas que se descubrieron durante varias excavaciones en la isla, las dos basílicas tripartitas de Agios Stefanos destacan por ser las más grandiosas y mejor conservadas de todas. Se estima que fueron construidas entre el 469 y el 554 d.C., fechas de los dos grandes terremotos destructivos que azotaron la isla, siendo el segundo el causante de la destrucción del monumento.

La gran basílica, que fue descubierta por el arqueólogo italiano Laurenzi en 1932, tenía un patio rectangular rodeado en sus tres lados por columnatas de pilares de granito, que fueron restauradas por los arqueólogos italianos. Las naves laterales de la iglesia principal también estaban separadas por columnatas, con pilares de mármol blanco y capiteles jónicos con figuras. El Synthronon (bancos para el clero) se distingue al este, en el ábside del altar. Una barrera de mármol que constituía el iconostasio separaba el altar de la iglesia principal. Ricos mosaicos con varios patrones geométricos y de otro tipo adornan este monumento y, en particular, el del nártex, que representa una síntesis de círculos y pavos reales.

La basílica menor, situada al norte de la basílica mayor, fue descubierta en 1935. Era una capilla del cementerio que existía allí y, por tanto, se caracterizó como basílica funeraria. Se han conservado el ábside del altar, el Synthronon y los cimientos de la pantalla de iconos.

Después de la visita podremos asomarnos a la hermosa playa de Agios Stefanos.

Regreso a Kos. Tiempo libre y cena final.

DÍA 9 (22/10): KOS – ATENAS – SEVILLA

Desayuno en hotel y check-out. Tras ello, se visitará el Museo Arqueológico y el Castillo Medieval de Kos.

En el museo arqueológico de Kos, situado en el casco antiguo de la ciudad, concretamente en la plaza Eleftherias (Plaza de la Libertad), se conserva una estatua de cuerpo entero de Hipócrates. En la actualidad, la ciudad de Kos acoge el Instituto Hipocrático Internacional y un museo dedicado al “primer médico de la antigüedad”.

Más tarde se visitará el Castillo Medieval, situado en la entrada del puerto de Kos. Está frente al Castillo de Halikarnassos (Fortaleza de San Pedro) situado justo enfrente en las costas turcas, con el que se colaboró para controlar los estrechos estratégicos entre Kos y Turquía. Se construyó inicialmente sobre un islote que bloqueaba la entrada del antiguo puerto y su entrada está situada en la Plaza del Plátano de Hipócrates, donde un puente cruza la Avenida de las Palmeras, que solía ser un foso hasta principios del S. XX.

El Castillo es la parte más significativa de la fortificación caballeresca y complementa maravillosamente la muralla que rodea la ciudad. Su objetivo principal era la defensa del mar y la protección del puerto y por eso está algo aislado de la defensa terrestre. No sabemos exactamente cuándo empezó a construirse, pero sí que ya existía a finales del siglo XIV.

El castillo se compone de dos muros circundantes fortificados, con el muro exterior rodeando y siguiendo el perímetro del muro interior que se construyó anteriormente. Los dos muros separados se juntan solo en el lado este. Están conectados por un camino cuesta abajo en pendiente, construido sobre los arcos de un antiguo puente, mientras que un amplio foso los separa en el lado norte, oeste y sur. El mar debe haber subido hasta el muro interior, antes de que se construyera el muro exterior.

Almuerzo en restaurante local.

Recogida en el hotel para realizarles el traslado al aeropuerto de Kos para tomar los vuelos de regreso

Kos-Atenas (17:55 -18:50) con enlace Atenas – Sevilla (20:55-23:55)

Llegada al aeropuerto de Sevilla, recogida de equipajes y fin del viaje.

*** FIN DE NUESTROS SERVICIOS ***

Precio:

• Por persona en habitación doble, 2800€ netos.
• Por persona en habitación individual, 3250€ netos.

Calendario de pagos:

Hotel:

El precio incluye:

• Traslado Sevilla-Madrid, en tren de alta velocidad
• Vuelo de ida: Madrid – Atenas – Rodas (Aegean)
• Vuelos de vuelta: Kos – Atenas – Sevilla
• Ferry Rodas – Symi y Symi – Kos
• Traslados aeropuerto-hotel-aeropuerto en destino
• Autobús privado a disposición
• Estancia en hoteles 4**** , en régimen de alojamiento y desayuno (salvo Isla de Symi, 3*)
• Almuerzo y cenas según programa
• Acompañantes desde origen, ratio 1/15, un profesor y un responsable de la agencia
• Guías de habla hispana
• Entradas a monumentos y visitas especificadas en el programa
• Seguro de viaje y anulación, valorado en  €.

El precio no incluye:

• Excursiones y entradas a monumentos NO mencionados en programa.
• Comidas en aeropuertos y estaciones.
• Bebidas en las comidas programadas (salvo agua).
• Maleteros, propinas y extras no incluidos en programa.
• Gastos de índole personal.
• Cualquier otro servicio no mencionado en “el precio incluye”

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